En Francia se a proclamado la II Republica, una vez mas un suceso meramente local desencadeno una ola revolucionaria que se expandió por una parte de Europa.
En febrero de 1848 la tensión llegaba a puntos extremos y estallo la Revolución tras una manifestación en la que participan diversos grupos sociales; sectores de la burguesía descontentos por la corrupción política y económica de la monarquía de Luís Felipe de Orleáns, y estudiantes y trabajadores descontentos por su precaria situación laboral y falta de derechos políticos, además de por una grave crisis económica que vive Francia, a ellos se sumó la guardia civil que plegó a la rebelión.
Durante tres días Paris se convierte en un virtual campo de batalla con barricadas, saqueos y enfrentamientos entre el pueblo y el ejército.
La monarquía ha hecho intentos para descomprimir la crisis pero grupos opositores (socialistas y republicanos) exigían la instauración de una Republica, finalmente Luís Felipe I abdica y huye con su familia a Inglaterra, éste es pillado en su huida y decapitado junto a su esposa.
Llegando a este punto se instala un gobierno provisional hasta que se apruebe una nueva constitución y se celebran elecciones.
Los resultados de estas revoluciones no son espectaculares, pero si dejan una profunda huella de las sociedades europeas que pone en manifiesto que el sistema de la restauración iniciado en Viena esta completamente caduco, por lo que se considera 1848 como “la primavera de los pueblos”.
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